La política energética de México centrada en combustibles fósiles pone en riesgo los derechos humanos de las generaciones presentes y futuras y no se encamina a una transición energética justa con perspectiva de derechos humanos, interseccional y de género. Frente a la emergencia climática el tiempo se agota y es apremiante aplicar medidas integrales y efectivas para combatirla. Conoce el Informe de monitoreo de la política energética con recomendaciones de organizaciones y redes de la sociedad civil al Estado mexicano: “Derechos humanos para una transición energética justa”.
